Los hombres suelen hablar muy mal del matrimonio (que si se te acaba la libertad, que si adiós a la buena vida y bla, bla, bla), pero lo cierto es que son muchos los hombres que se casan y que, cuando lo hacen, lo celebran a lo grande. Por ejemplo: son pocos los hombres que deciden cambiar de estado civil sin celebrar una despedida de soltero con los amigos.
La de las despedidas de soltero es una costumbre que poco a poco ha ido enraizando en nuestra sociedad. En cierto sentido, se considera la despedida de soltero como la ocasión perfecta para desmadrarse a lo grande. Bajo el lema "lo que pasa en la despedida de soltero se queda en la despedida de soltero" se permite prácticamente todo. Hemos visto películas sobre despedidas de soltero cuyos guiones parecen escritos bajo los efectos de algún estupefaciente y hemos sabido de novios que, tras su fiesta de despedida, han amanecido, borrachos y desorientados, en una ciudad desconocida.
Sín duda, hay maneras y maneras de celebrar una despedida de soltero. Una de las que se ha hecho más habitual en las última décadas es la de contratar para la ocasión a una escort para despedida de soltero. ¿Para qué? Las respuestas a estas preguntas pueden ser muchas. Se puede contratar una escort para que ésta realice un striptease. Éste puede ser en privado para el homenajeado o en grupo para todos los invitados a la despedida. En el segundo caso, lo más corriente es que la intervención de la escort acabe ahí: en el desnudarse con elegancia, estilo y erotismo ante un grupo de hombres que, en su mayor parte, lleva una copa de más. En el primero, en el que la escort realiza el striptease para el novio en privado, la intervención de la escort puede ir mucho más allá del simple desnudarse. Todo dependerá de lo que se haya contratado.
Imaginemos que los amigos del futuro novio saben que éste es virgen y, como buenos amigos, deciden poner fin a esa virginidad para que el pobre no tenga que estrenarse en la noche de bodas. La despedida de soltero es una gran ocasión para hacerlo. Regalar una cita con una escort a un amigo virgen cuando éste está a punto de abandonar su soltería es un grandísimo regalo. ¿Qué mejor sitio hay, para perder la virginidad, que en el cuarto de una escort de lujo? ¿Qué mejor maestra puede tener un aprendiz de follador que una maestra del sexo?. Lo ideal para ello es contratar una escort independiente, en Barcelona y Madrid hay muchas de estas profesionales que ofrecen este servicio.
En caso de que el novio no sea virgen y haya hecho ya sus pinitos en eso del follar, los amigos pueden aprovechar la ocasión de la despedida de soltero para conseguir que el protagonista de la misma haga realidad alguna fantasía erótica por cumplir.
Todos tenemos fantasías eróticas pendientes. Puede ser, por ejemplo, practicar el griego (la novia no se ha dejado empotrar por detrás). O gozar de un beso negro (a ella le da asco recorrer con la lengua según que parte del cuerpo de su novio). O disfrutar con un dúplex (¿qué hombre no ha fantaseado con la posibilidad de estar en la cama con dos mujeres al mismo tiempo?). O experimentar qué se siente cuando una mujer te orina encima (sí, hay hombres a quien les gusta la lluvia dorada). En cualquiera de estos casos, los amigos deben buscar una escort para despedida de soltero que incluya alguno de estos servicios en su cita íntima y discreta con su cliente.
Si el novio quiere vivir una experiencia algo más hard, los amigos pueden buscarle una escort para despedida de soltero especializada en técnicas de sado light.
De una forma u otra, el objetivo de utilizar una escort para despedirse de la soltería es convertir la despedida de soltero en una fiesta sexual. Más o menos salvaje, más o menos ardiente, con más o menos límites, pero sexual en cualquier caso. Y, por supuesto, compartida con los amigos.
Lo primero que hay que tener claro si se desea contratar a una escort para una despedida de soltero es que su contratación no implica que la escort esté obligada a tener sexo con el novio. Solo lo tendrá si se contrata ese servicio específicamente.
Lo más habitual es que la contratación de una escort para despedida de soltero se base en la contratación de un servicio de striptease. Es decir: la escort se irá desnudando poco a poco al ritmo de una música sugerente. En este tipo de servicio, la escort no puede, en caso alguno, ser tocada. La escort, en estos casos, se arrimará al novio y, posiblemente, se rozará con él. Pero todo quedará ahí.
Hay grupos de amigos que, a la hora de decidir qué tipo de escort o de servicio contratar para una despedida de soltero, optan por un espectáculo lésbico. A los hombres siempre nos ha puesto ver a dos mujeres montándoselo. Basta mirar las estadísticas de búsquedas en páginas de sexo online.
Ver cómo dos mujeres se lo hacen entre ellas es un buen espectáculo para que disfrute un grupo de amigos que esté celebrando una despedida de soltero. Es muy probable que, tras ver un espectáculo así, los presentes en la despedida deseen algo más. En estos casos, la mejor manera de rematar una despedida de soltero y de ponerle fin (antes de irse a comer los churros del desayuno) es acudir con todos los amigos que participan en la despedida a una agencia de escorts. Vamos, lo que tradicionalmente era "irse de putas" pero con más glamour y elegancia.
Tras una buena cena, unas copas y unos bailes, el que los amigos se vayan juntos a follar con algunas sexys y guapas chicas de compañía es una excelente manera de decir adiós a la soltería. Todos juntos en el mismo espacio (el sexo en grupo puede resultar muy excitante) o en habitaciones separadas, visitar una agencia de escorts para celebrar una despedida de soltero es siempre una gran idea que sirve para reforzar la amistad y para tener cosas que añorar y de las que hablar (aunque sea en petit comité) en el futuro.